Depilación láser

Durante la depilación, un láser emite una luz que es absorbida por el pigmento (melanina) del vello. La energía lumínica se convierte en calor, que daña los sacos en forma de tubo dentro de la piel (folículos pilosos) que producen vellos. Este daño inhibe o retrasa el crecimiento futuro del vello.

La depilación láser sirve para un sinfín de problemas del pelo, tanto médicos como estéticos: exceso de vello corporal o facial, foliculitis o enquistamiento… En mujeres con problemas hormonales es la mejor solución, frente a medicaciones hormonales que implican multitud de efectos secundarios.

Desde el punto de vista estético, cada vez más hombres y mujeres recurren a la depilación láser para terminar con el vello de cualquier parte del cuerpo y no volver a preocuparse por él.